Fuente: CCOO
En esta Reforma Laboral se reconoce expresamente que los pactos y acuerdos de empresa pueden ser modificados unilateralmente por el empresario.
Afecta a todos los pactos y acuerdos, aunque se hayan negociado con la mayoría sindical. Afecta a todas las materias (jornada, horario, turnos, sistema de remuneración, rendimiento, funciones…) y se puede llevar a cabo por simples razones de mejora empresarial.
Se otorga, por tanto, mayor poder al empresario en detrimento de la flexibilidad negociada y la participación sindical.
Todo esto da lugar a la pérdida de derechos y a un empeoramiento de las condiciones de trabajo.
Unas medidas injustas y regresivas que tendrán continuidad, como ya anunció el presidente del Gobierno durante el debate sobre el Estado de la Nación, con la reforma del sistema público de pensiones que pretende alargar la edad de jubilación a los 67 años con carácter obligatorio y con la modificación de la prestación por desempleo.